Enseñar con tecnología no es fácil. Una de las mejores maneras de comprender la complejidad de enseñar a través de la tecnología es analizando tu propia forma de enseñar a través de ver videos grabados de tus clases y también pre grabando lo que vas a enseñar en la clase. Otra forma de aprender es mirando a otro profesor dar clases y comentar entre ambos.
Cada vez que se quiera utilizar una herramienta tecnológica nueva hay que preguntarse si a los alumnos les va a resultar más sencillo realizar la actividad con esa herramienta tecnológica. Si la respuesta es no, no hay necesidad de usarla. Se usa una herramienta nueva solo si va a ser útil.
Solemos pensar que los jóvenes por ser nativos digitales saben utilizar las herramientas tecnológicas. Pero hay que tener en cuenta que usar las redes sociales no es lo mismo que usar la tecnología para estudiar. Es totalmente diferente, son nuevas habilidades y comprensiones las que se usan para aprender con tecnología.
Tendemos a poner la tecnología en el centro de todo. Se cree que aprendiendo sobre las herramientas y cómo se utilizan ya está resuelto pero no es así. Hay que aprender cómo enseñar con cada herramienta en particular. Se necesitan materiales que enseñen a los profesores a hacerlo, que tenga todas las diferentes actividades de aprendizaje que se pueden realizar con esa herramienta. Estas tienen que ser actividades que se puedan combinar en un plan de clase. Una vez que se tenga el plan de clase, recién ahí seleccionar la herramienta tecnológica que se va a usar.
Traducción de Adela Suarez
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